El beagle 2 no envía señales de vida. He esperado un rato antes publicar el post, porque es un poco frustrante dar malas noticias un 25 de diciembre por la mañana. Bueno, los encargados dicen que aún se pueden recibir noticias de él hasta el viernes por la tarde. Este pequeñísimo robot explorador es un esfuerzo de la Agencia Espacial Europea, y su misión era amartizar sobre la parte meridional del planeta marte, con el mismo método de aterrizaje del Pathfinder, con airbags gigantes.
Es una lástima, ya yo tenía preparado desde anoche mi Cerelac, con doce vitaminas y cinco minerales y sus característicos grumitos, para celebrar el que otro artilugio humano se posara sobre en algún sitio allá afuera. A mi esas cosas me siguen pareciendo milagros medievales.
Bueno, a esperar a ver si aparece, se está valiendo de la sonda Estadounidense Odyssey para captar su señal de vida, compuesta a propósito para la ocasión por la banda británica de rock Blur.
Una pena, también por el uso de Linux en el proyecto…
a las doce de la media noche de hoy es que harán el siguiente intento. Así que aún hay esperanzas.
Y yo como siempre me pregunto, ¿cuántos vasos de cerelac se le hubieran dado a los niños que hoy amanecieron hambrientos con el dinero usado para Odyssey y Beagle?
Creo que varios cientos de millones de vasos. Pero los beneficios que la humanidad recibe de éstas iniciativas científicas son superiores a los vasos de Cerelac. Eso con toda seguridad, incluso cuando son fracasos.
La catástrofe del hambre no es un problema científico, ni siquiera económico, sino político. Como los niños de la calle (no me gusta la denominación pero para entendernos) en Latinoamérica. Hay países pobres con las riquezas necesarias para solucionar este drama, ya que económicamente no es muy costoso. Pero los niños siguen allí, como un signo de vergüenza que no tiene más culpables que la misma socidad y sus mismos gobernantes. No se suelen hacer grandes luchas contra pequeños enemigos, y esa lucha no tiene otra bandera que la demagogia
En todo caso, me gustaría reducir presupuestos en otras áreas, como las guerras preventivas.
Besos.
al menos en Irak atraparon a Sadam
Beagle, que yo sepa, no ha atrapado nada…
Confio en no equivocarme al pensar que, en la perspectiva de tu análisis podríamos incluir lo siguiente:
El Beagle ha atrapado conocimiento, que puede ser usado para ésta y futuras generaciones de humanos. Conocimiento del_mismo_tipo_que ha permitido que, por ejemplo, el agua deje de ser un transpote de muerte, que no nos muramos de una simple gripe o que hayamos quitado la exclusiva de la lectura a la iglesia, gracias a la invención de la imprenta.
Capturando al tirano, se ha atrapado, más que nada, venganza. Y los cuestionables beneficios de ésta, alcanzan cuando mucho a una generación. Obvio, también se ha atrapado oportunidad, para que un pueblo oprimido resurja, prospere y se haga justicia, pero eso no dependía de atrapar a nadie.
Finalmente, para generar el conocimieno del Beagle 2 sólo se invirtieron 300 millones de Euros y no se perdió ni una sola vida…
La Ciencia nos da libertad Susana. De hecho, es un signo distintivo de la especie como lo son la poesía, la música, la pintura o el amor. Si miras a tu alrededor, verás, ciencia. Detrás de la pantalla en la cual me lees, hay muchos Beagles 2 de historia.
La Ciencia es evolutiva mientras que la guerra es recurrente.
Besos.
Ocatrapse.
La ciencia explica las cosas que son inexplicables
La ciencia, querido S., es lo que generó la energía basada en petróleo, las armas (biológicas y no biológicas) y los medios de transporte que han provocado todos esos muertos
Sí, miro alrededor e incluso me miro a mí misma y veo ciencia pero ¿a qué costo?
Preferiría ser quemada por bruja
que ver la destrucción masiva
‘en nombre de la ciencia’
…soy modernista aunque no lo parezca
amo la carrera espacial
pero…
: suspiro :
¡Ah! creo que ya entiendo lo que quieres comunicar. En ese caso, la culpable no es la ciencia, es el hombre (y la mujer), que además tiene una tendencia anscentral a buscar culpables externos: Ya nos matábamos y nos sacábamos los ojos a puño limpio y de forma masiva antes de la existencia del fuego y la rueda.
La Ciencia inventó la imprenta y de ella han hecho uso, tanto Joyce como Hitler. Y al menos por Joyce, ya se justificó la inversión.
>>Sí, miro alrededor e incluso me miro a mí misma y veo ciencia pero ¿a qué costo?
El costo_de_la_ciencia no es una consecuencia sino un requisito. Luego, el costo_del_uso de los descubrimientos de la ciencia es una custión cuya responsabilidad atañe al hombre.
Besos.
Refuerzo de lo anterior.
Más que el costo, miro los ahorros 🙂
Besos otra vez.
yo quiero que me den dinero para hacer unas películas, eso es todo
besos + besos
Yo como siempre me pregunto: ¿cuantas escuelas se construirían con con ese dinero para hacer películas? 😉
Besos^2
prefiero a las películas…
que el mundo sea autodidacta
: ) ja
besos
vez!! ya lo decía yo en esta nota, http://www.ocatrapse.org/b2evo/blogs/index.php?p=80&more=1&c=1&tb=1&pb=1 los inventores tiene un destino injusto, ya nadie se acuerda de los hermanos Lumière cuando se habla de películas.
Más injusto es cuando se hace ciencia para que la use el arte, porque luego los artísticas reniegan de la ciencia. Así, nadie recuerda al hacedor de pigmentos después que está hecha una pintura, o al hacedor de la tinta una vez que está impresa la obra o al creador del software una vez que están hechos los efectos especiales. Siempre recuerdan al artísta… y el artísta cuando gana un premio sólo se acuerda de de su mamá, de su mujer, de su agente y de los «miebros del jurado»
¡Oh! 😉
Besos
No sé porqué, pero esto no lo había leído en su oportunidad. Y al igual que de cuando en cuando reviso mis libros ya leídos, me puse a revisar mis artículos electrónicos del «Oca’s Journal».
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Oca, tu último párrafo me vino con música y todo, gracias a Serrat
(again, I know) «…. que cuando nace una flor, al olor de la flor se le olvida la flor… Señora»
A mí me encanta el frío, por lo que aprecio sobre manera el aire acondicionado de mi carro a las 12 m, y el de mi oficina en la canícula de verano que suele durar todo el año, pero no tengo ni idea de a quién le debo tal confort ¿Será al señor Frigidaire, o a un tal General Electric ?
Saludos,
Palas
Pues fíjate tu. Me encanta lo que haces, en eso de repasar. No te imaginas el honor.
Con respecto al aire acondicionado, como la rockola, este nombre te sonará. Lo inventó Willis Haviland Carrier en 1902.
Si quieres puedes echarle un ojo a esto rescatado de mis bookmarks.
http://inventors.about.com/library/weekly/aa081797.htm
Besos