Hace unos meses, visitaba por motivos de trabajo la nueva Terminal del Aeropuerto de Madrid Barajas. Es alta y ondulada, por lo que me recordó al tipo de las iglesias renacentistas, con sus cúpulas iluminadas y sus penitentes arbotantes. Mientras buscaba un cajero electrónico, topé de repente con una señal que indicaba la dirección de la Capilla del Aeropuerto, curioseado me acerqué. Mientras veía su austera decoración, me preguntaba por qué una construcción tan nueva y laica, incluía en su planificación una Capilla Católica. Para qué podría servir una Capilla, justo allí, donde precisamente la gente pasa y no se detiene.
Dándole vueltas, pensé que en todo caso quienes confesaran otras religiones, también deberían contar de un lugar para celebrar sus ritos, dado que, los aeropuertos son unos de esos pocos lugares donde, juntos pero no revueltos, pueden coincidir pacíficamente los fieles de todas las creencias.
La respuesta estaba a mi espalda. En efecto, había dos salas más habilitadas, una como mezquita y otra como sala interconfesional.
Aunque me resultaba equitativo, seguía sin enterarme porqué en un aeropuerto. Las argumentaciones por analogía me llevaban a pensar que también debería haber capillas en las estaciones de tren, en las de autobuses y, si a ver vamos, hasta en las gasolineras. Pero después de buscar un rato, di con la respuesta. Las Capillas Católicas, así como los templos religiosos en general, dentro de los aeropuertos no están pensados esencialmente para los pasajeros, sino para las tripulaciones y empleados de los aeropuertos. Y que curiosamente en el caso de la Iglesia Católica, – digo curiosamente más por ignorancia que otras cosa – existen unas Directivas de la Pastoral de la Aviación Civil, promulgadas por el Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes. Entiendo que otras religiones también cuentan con iniciativas similares.
Me sorprendió encontrar documentos que regulen el uso de las Capillas. Por cierto ¿habrá alguno que regule el de los baños del aeropuerto? Hay tantos usuarios guarros, que debería estar expuestos a sanción.
La religión sigue y seguirá siendo el albergue en que los humanos necesitamos refugiarnos. Explicarnos a nosotros mismos sin una intervención divina que nos justifique es aún bastante complejo, que no está al alcance de todos. Pero daremos un gran paso, cuando para vivir nuestra religión, la de cada uno, no nos haga falta un templo, sino la cotidianidad de nuestras acciones.
Un comentario bonito
!… Pero daremos un gran paso, cuando para vivir nuestra religión, no nos haga falta un templo, sino la cotidianidad de nuestras acciones.»
Me quedo con esta hermosa frase, que a mi juicio expresa en forma sencilla y terrenal lo que constituye la verdad interior de todos, aun cuando no tengamos conciencia de ello.
Un abrazo con mi cariño de siempre y mi admiración creciente, mi querido amigo Oca!
Palas A.
«La religión sigue y seguirá siendo el albergue en que los humanos necesitamos refugiarnos.»
…O la medicina que nos hemos inventado para mitigar otra realidad en la que no somos más que efímeros viajeros que aparecen y desaparecen en un nanosegundo en casi invisibles destellos del universo