Imagine all the people.

De en medio del bullicio y el apretujamiento, se sobrepuso una voz fuerte y clara que preguntó dos veces si alguien sabía en cuál estación estaban. Era una pregunta a priori necia, porque cualquiera puede enterarse viendo hacia el anden. Es por eso que nadie dijo nada, y pasaron unos segundos hasta que una chica respondió, al percatarse de que quien preguntaba y su acompañante, eran invidentes. Iban bastón en mano y ataviados con los colores del Real Madrid, se dirigían, como el 110% de los viajeros de ese convoy del metro, al Estadio Santiago Bernabeu para “ver” el clásico de la jornada, que su equipo disputaba contra el Atlético de Madrid.

Un señor mayor, no soportó la curiosidad y volteó para preguntarles cómo le hacían para “ver” el juego, a lo que los chicos respondieron: lo vemos por la radio y por los gritos de la gente, mientras dibujaban círculos en el aire con su antebrazo, para referirse a las ochenta mil almas que junto a ellos colmarían el estadio esa noche.

Me encuentro desprovisto de recursos para ayudarles a hacerse una idea, de lo que el fútbol representa para los españoles. Mi postura explicativa sería: los hombros levemente encogidos, los dedos de mi mano derecha juntos, al estilo italiano, la boca apretada y la frente dibujando una expresión de frustración, así que simplemente háganse a la idea de que les resulta vital. Pero la escena que les he contado me interesa, no por el fútbol, sino por otra cosa: Me permitió percatarme, por contraste, que para la mayoría de nosotros, los “videntes”, la vista posee el monopolio de la imaginación.

Tuve un jefe -del cual adopté un curioso gusto por las cafeteras- que decía que la vejez comenzaba cuando dejábamos de fantasear, y creo que este verbo es el más adecuado para describir, lo que perdemos cuando centramos nuestra capacidad de imaginar solamente en el sentido de la vista. En las imágenes.

El DRAE define fantasear como un grado superior de la imaginación y eso me sirve. Cuando niños, poníamos todos los sentidos a trabajar para fantasear. Jugando a policías y ladrones hasta “sentíamos responsabilidad”. Habían fantasías auditivas, gustativas y táctiles. Lo que es una lástima, es que se adormezcan estas capacidades, porque creo que servirían no solamente como terapia, sino como una excelente herramienta trabajo. ¿Se acuerdan de los ex hippie?, creo que ellos aún la conservan.

Se atrofian tanto los otros sentidos para participar en la imaginación, que hasta la medicina alternativa hace fortuna para despertarlos: aromaterapia, musicoterapia, masaje metamórfico, uf.

De momento comenzaré, con dosis homeopáticas, por el sentido del oído. Eso si, con mucho cuidado, porque la imaginación es “la loca de la casa”, y no vaya a ser que empiece decir lo que no quiero escuchar.

6 pensamientos en “Imagine all the people.

  1. A mí me basta una tableta de un buen chocolate de puro cacao, para transportarme a las haciendas donde se cosecha, o a un paraje nevado y con -5º donde imagino esa tableta junto con muchas otras más, convertida en una rica y espesa crema de chocolate.
    Así será mi imaginación que mientras esto escribo, la loca de la casa con su capacidad de convencer a todos los sistemas orgánicos, me tiene las glándulas salivares en plena actividad.
    Salgo volando a materializar el producto de mi imaginación.
    Y si engordo, ya tengo a quien echarle la culpa…

    Palas

  2. Una de las cosas que me ha llamado la atención del budismo es precisamente ese «revivir» de los otros sentidos. Es decir, te hacen tomar en cuenta un nuevo aprendizaje de «escuchar» sonidos que antes no escuchabas, de darte cuenta de olores que antes no olías. Incluso la búsqueda de ese tan llamado sexto sentido que tenían los antiguos primitivos y los cazadores de antaño y que la urbe ha castrado.

    Bien dicho lo anterior tengo curiosidad por algo. ¿Es usted un venezolano radicado en España? ¿O es usted un español que vivió en Venezuela y regresó a España?
    Claro hay una tercera opcion que sería, no soy nada de eso.

    Bueno saludos ocatrapse, sus post son bastante reflexivos. (Aunque un poquito largos 🙂

  3. En efecto el budismo trata propiciar ese renacer, pero desde una perspectiva distinta. Procura el que seas consciente de ellos, pero siempre a partir de la realidad. Oler olores reales, escuchar sonidos reales. Y está muy bien. Aunque a lo que me refería estaba más orientado a la capacidad de «evocar/inventar/crear» olores, sonidos, sensaciones y sabores, en la imaginación.
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    Con respecto a tu pregunta, creo que para ser objetivo tomaré la tercera opción. Aunque si me viese en el compromiso de definirlo, diría que soy un Emigrante Venezolano. (es decir, sin relación familiar/cultural alguna con España) Más detalles es un poco complejo, porque como no tenemos tradición migratoria originaria, hará falta un poco de tiempo y más emigrantes para que nosotros mismo sepamos cómo somos como colectivo. (fuera de nuestra tierra).
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    Esta respuesta ya debe ser un poco larga, como los post 😉 . Realmente los hago así deliberadamente. Hay gente que acostumbra a escribir varios post al día, algunos son, avisos, comunicados, anécdotas en tiempo real, reflexiones, de todo, y eso es lo bonito de esta «libertad» y de compartir conocimiento. Como no lo hago así, lo que más me llena es escribir 3 ó 4 «cartas jeroglíficas» por semana sobre cosas que me gustaría compartir y en ellas trato de encerrar las cosas que no escribo de forma explícita. Alguien me dijo que son posts para «lectura lenta». De lo único que me cuido, es que no se inviertan más de 3 minutos en leerla y para eso coloco un tiempo orientativo arriba a la derecha de cada nota.

    Gracias por leer y compartir.
    Saludos

    PD:¿podría usted tutearme?

  4. Señor acatrapse su post me parece muy acertivo y eloquente, le dire mas cuando lo termine de leer porque la vida misma no me ha permitido tanta dicha de una buena lectura vespertina.

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